Fotos de viajeros
Naturaleza apacible
Guer significa «aliso» en galés y «pantano» en bretón, por lo que no es de extrañar que entre sus alrededores se encuentren el bosque de Brocéliande y la reserva natural de los páramos de Monteneuf. Para disfrutar plenamente de este vínculo con la naturaleza, ¿qué mejor manera de descubrir la zona que en bicicleta y recorrer la voie verte? Esta antigua línea de ferrocarril que une Guipry-Messac con Ploërmel ofrece un itinerario de 47 km alrededor del cual se construyen varios bucles pedestres.
Descubrimiento histórico
A pocos kilómetros de Guer se encuentra el Prieuré Saint-Etienne. Discreto y rodeado de vegetación, esconde numerosos tesoros, entre ellos una de las capillas más antiguas de Morbihan. En el siglo XIX, su capilla fue redescubierta por intelectuales, ¡pero no fue hasta 1957 cuando se reveló toda su belleza! Mientras un investigador del CNRS pescaba en el Oyon, el río que bordea el priorato, empezó a llover y se refugió en la capilla. Raspó el yeso que cubría las paredes y descubrió frescos del siglo XV… La capilla está clasificada como monumento histórico desde 1971.
Una reputación internacional
Guer, ciudad tranquila y reposada, esconde un lado mucho más insólito de lo que su apariencia podría sugerir. A tan sólo unos kilómetros, se encontrará en un mundo en el que los uniformes son los reyes y marchar al compás es una obligación. La ciudad alberga la Academia Militar de Saint-Cyr Coëtquidan, que forma a todos los oficiales del ejército francés, así como a numerosos oficiales extranjeros de todos los continentes.
Todos los años se celebra el Triunfo de Saint-Cyr: una jornada llena de color que ofrece a todos los visitantes la oportunidad de descubrir las escuelas, el ejército y los demás ejércitos. Esta fiesta marca el final de la escolarización de los cadetes y recorre la historia militar de los Saint-Cyriens y la vida de las escuelas a través de espectaculares recreaciones a tamaño real.