Fotos de viajeros
MERLÍN SIGUE EN BROCÉLIANDE
Aunque son muchas las leyendas artúricas, la tradición armoricana sitúa la tumba de Merlín en el bosque de Brocéliande. Más allá de esta certeza, la forma de su prisión varía.
Se dice que Merlín está encerrado en una caverna ricamente decorada, donde duerme un sueño eterno. Una espesa niebla lo oculta a los transeúntes, está encerrado en una torre de aire o en una piedra que gira sobre sí misma. Pero Merlín puede estar en otra parte, atrapado en el tronco del árbol más viejo del bosque. A no ser que todo el bosque sea su prisión y siga vagando por él, con Viviane a su lado. Vigilantes del mundo mágico, invisibles o metamorfoseados, se metamorfosean a su antojo: ciervos y ciervas, pájaros, mariposas, árboles entrelazados. Son amantes eternos.
¿DE VERDAD, LA TUMBA DE MERLÍN?
Entonces, ¿por qué estas tres piedras se llaman la Tumba de Merlín? La caverna puede distinguirse alrededor de las piedras, aquí y allá, donde el suelo suena hueco. Detrás del monumento crece un espino. Según la leyenda, fue bajo un espino en flor donde Viviane atrapó a Merlín en la trampa del hechizo irrompible que éste había tenido a bien regalarle. En cuanto a las piedras, giratorias o no, están ahí, ante nuestros ojos. ¿No parece gran cosa? Pero este Encantador opera sin gesticulación, sin trucos, sin fórmulas ni canciones: y ése es el signo de un mago muy poderoso. Y lo mismo ocurre con Merlín que con Broceliande: los encantos más invencibles no son los más espectaculares. Pero su magia funciona imperturbable, en todas partes y siempre.